Esta casa, situada en el casco antiguo de Altea, destaca por sus inmejorables vistas al mar Mediterráneo. Desde la entrada a la vivienda, el mar de fondo ya nos indica que nos encontramos en una casa de dos plantas muy especial, reformada con muy buen gusto.
En la planta principal, diáfana, encontramos el amplio salón, comedor, cocina, aseo de cortesía y acceso a una maravillosa terraza. Y en la planta baja se encuentran los dos dormitorios, ambos con baño en suite y acceso directo a otra encantadora terraza.
A tan solo un minuto de la Plaza de la Iglesia con su famosa cúpula azul y de los mejores restaurantes, cafeterías, bares y tiendas pero en una calle muy tranquila. No pierdas la oportunidad de disfrutar de esta maravillosa casa y convertirla en tu hogar.